domingo, 13 de septiembre de 2009

Hasta pronto


Nadie se preguntará
por qué el cielo lloraba
un día de septiembre.
Tan común y tan corriente.
Sin embargo tan distinto.
Nadie sabrá nunca
por qué Granada estremeció
sus aceras y fachadas a tu espalda.
Y al eco de tus pasos
contestará el vacío que dejas
tras de ti.
Nadie buscará en tu maleta
nuestro abril,
llegada la primavera.
Y ni siquiera se preguntarán
adónde han ido las hermosas galas
de tu flor preferida.
Nadie buscará
en tus huellas la respuesta.
Nadie tiene que saber
cuánto de mí muere hoy.
Para renacer el día
que volvamos a vernos.
Con la mirada más cansada.
Tan parecidos y tan distintos,
provenientes de mundos lejanos.
Recordaremos lo que compartimos
dos o tres vidas atrás,
por lo menos.
Nadie reparará en sutiles ausencias.
Nadie recordará un trece de septiembre,
tan común y tan corriente.
Nadie se preguntará,
por qué el cielo lloraba hoy...




"Y odiaré con calma tu risa
y todas mis palabras
en nuestra despedida..."


Nuestro mundo seguirá aquí, para cuando vuelvas cargada de vida y experiencias.

Te echaremos de menos.