miércoles, 29 de abril de 2009

Ascuas





Envuelto en nebulosas
que levanta al galope
con brío y vigor,
pelaje negro y ojos de oráculo.
En la huella de sus pisadas
la vida se asoma cautelosa,
al estruendo de sus cascos
que hace tanto enmudecieron
en este lar.
¿Qué sísmica epístola
traerá en la grupa esta vez?
¿Con qué intención
se paseará majestuoso por aquí?
Así llega siempre,
sin respuestas a mis ruegos,
sólo arena y conmoción,
nostalgia y ascuas...
¿Adónde diriges tus pasos,
célere mensajero?
¿Acaso no me dejas más
que ceniza?
Así se pierde otra vez,
sin respuestas a mis ruegos,
sólo retazos de carbón...
...arena y ascuas...

La voz del tiempo se manifiesta caprichosa, recordándote que hay cosas que es mejor no dejar pasar...